sábado, 27 de julio de 2013

¿Qué puedo hacer yo?

    Este país no lo dirigen los políticos de los partidos mayoritarios, lo dirigen los que les mueven los hilos a cambio de impunidad y pingües beneficios económicos. Un mismo grupo de poder, la oligarquía económico-financiera, no puede ser simultáneamente causa y solución del mismo problema. No tiene sentido decirles a los políticos que nos están jodiendo, porque lo saben; no tiene sentido pedirles que lo hagan mejor, porque cumplen las órdenes recibidas a la perfección; no tiene sentido invocar a la alternacia, porque es cambiarle el collar al mismo perro; lo único que hoy tiene sentido es derrocar y sustituir un sistema que nos convierte en esclavos y ni siquiera en esclavos listos.

   Necesitamos un Estado moderno y, ante todo, decente. Creo en una república federal, radicalmente democrática, social, laica y ecológica. Creo que, tras casi 80 años de secuestro del poder, toca devolvérselo a su legítima dueña, la ciudadanía. No esperéis que los que mandan desmonten voluntariamente su productivo chiringuito, habrá que empujarles (mucho o poco depende de lo que se resistan).

    Sí, muy bonito, pero ¿qué puedo hacer yo?. Sola/o, nada, pero no estás sola/o. Estás sentada/o ante una de las herramientas más poderosas de nuestra era, la puerta de entrada a la información, sólo hay que darle un uso adecuado a los tiempos que vivimos. Algo se mueve, existen múltiples iniciativas encaminadas a la concienciación y movilización popular, no escribo esto para hacer propaganda de la que yo he elegido, busca la tuya y ponte en contacto con otras/os ciudadanas/os que también decidieron dejar de estar solas/os contra el poder. Utiliza Internet para informarte, para contactar, pero únete en persona, participa y trabaja. No se cambia un régimen injusto e ilegítimo dándole al "Me gusta" de una red social de Internet. Quien fomente la "ciberrevolución" es que te quiere quieta/o, sentada/o ante un ordenador o abducida/o por un smartphone o similar.


 
    Somos más que ellos, muchísimas/os más. No tienen suficientes porras para detenernos cuando decidamos avanzar, siempre que avancemos juntas/os. La actual situación no tardará en reventar y cuando lo haga abrirá tres caminos: la involución (hacia la dictadura sin los actuales disimulos), un segundo engaño (segunda transición, con una república de pega) o la revolución (hacia la democracia con la ciudadanía como poder), que no nos pille pensando "¿pero qué puedo hacer yo?". Ponte en marcha, sólo pueden tratar de caminar juntas/os las/os que caminan.


      Málaga, 27 de Julio de 2013.

      Un militante de Alternativa Republicana (ALTER) de Málaga.

      Salud y República

sábado, 20 de julio de 2013

UNA HISTORIETA PARA UN DÍA CUALQUIERA.


   Un enfermo grave llega a un hospital y la mayoría del personal se desentiende como si no fuera con ellos/as. Pero hay un grupo de profesionales que se escandaliza, se indigna, no pueden dejar a un paciente sin atención, no es una opción porque son profesionales comprometidos/as. Se organizan y comienzan a tratar los síntomas del paciente, quieren aliviar su sufrimiento, pero no se dan cuenta de que en el mejor de los casos el paciente morirá con menos sufrimiento, pero morirá. En la organización del grupo faltó quien se ocupara de atacar la causa de la enfermedad.
 
   En otro hospital, ante un caso similar, la escasa minoría de profesionales responsables se concentra en atajar la causa de la enfermedad, los síntomas les parecen secundarios y poco importantes. En el mejor de los casos salvarán la vida del paciente, pero le habrán condenado a sufrir evitablemente. Cabe la posibilidad de que el propio sufrimiento mate al paciente antes de vencer la causa de la enfermedad.
 
   Un tercer paciente, con similar problema, acude a un hospital "normal". Los/as profesionales están por cumplir con su obligación, están organizados/as para afrontar problemas desde distintos frentes. Reciben al paciente, estudian su caso, inician las medidas para aliviar su sufrimiento al mismo tiempo que para desactivar la causa de su enfermedad. El paciente tiene muchísimas posibilidades de salvar su vida y de que su sufrimiento se haya reducido al estrictamente inevitable.

 
   En esta pequeña "cutrefábula" el paciente es España, el Estado Español, los/as profesionales somos nosotros/as, el conjunto de la ciudadanía. Podemos elegir qué tipo de hospital queremos, estamos a tiempo. Lo que no podemos permitirnos es mirar para otro lado, desentendernos del futuro de un paciente del que además depende nuestro futuro y, ojo, el de nuestros hijos.
 
   En Alternativa Republicana (ALTER) estamos por atacar a las causas de la actual situación, la monarquía franquista, colaborando lo más estrechamente que se pueda (y nos dejen) con los/as que luchan por mejorar las condiciones de vida de la gente, defendiendo los servicios públicos y los derechos constitucionales que nos están arrebatando con la mayor de las desvergüenzas.
   Te ofrezco un sitio para que no luches sol@, pero da igual el sitio que elijas porque nos encontraremos en la lucha. El sentido común nos hará caminar juntos/as más pronto que tarde.
 
   Tenemos la oportunidad de demostrar que no estamos muertos/as, que no nos merecemos lo que nos está pasando. Por favor, infórmate donde quieras pero infórmate, acude con quien quieras pero acude. No te lo pido por mí, te lo pido porque quiero que mi hijo viva dignamente como un ciudadano libre, no como un súbdito y un esclavo.
 

     

      Málaga, 20 de Julio de 2013.

      Un militante de Alternativa Republicana (ALTER) de Málaga.
  

      Salud y República.



 

 

miércoles, 3 de julio de 2013

¿Cuándo se rebelará la gente? (y 2).

    La primera entrega se centró en la necesidad de una toma de conciencia individual como precursora necesaria de una conciencia colectiva. Ésta se centrará en la rebelión en sí, en lo que se le pide a la ciudadanía, a quienes ya se han rebelado individualmente.

    Cuando nos fijamos en las propuestas de movilización, podemos distinguir dos tipos fundamentales:
  1.- Las promovidas por organizaciones integradas en el sistema para mejorar su situación en el seno del mismo.
   2.- Las promovidas por organizaciones críticas con el sistema, pero poco dadas a presentar alternativas. Es la queja por la queja, como mucho algún encomiable intento de paliar consecuencias concretas de la situación de opresión que vivimos.
 
    Nos quejamos de la pasividad de la gente, pero ¿no será que a la gente no le interesa ni el mercadeo político en el seno de la monarquía franquista ni la queja por la queja? ¿No será que lo que falta es un objetivo claro y viable que mueva a la gente de una vez por todas?
 
    Quizás haya llegado el momento de cambiar el planteamiento. No podemos seguir dejándonos manipular. No podemos entender como un conflicto entre la derecha y la izquierda monárquicas lo que es una situación de opresión de la gran mayoría de la población por parte de los especuladores y corruptos, valga la redundancia.

    El problema no es la política en sí, sino un sistema corrupto e ilegítimo para el que las personas son sólo un medio que permite ganar dinero. El problema son los políticos que se han dejado comprar por el sistema y monopolizan nuestro derecho a decidir, no la política, la política es la solución.

    Si el problema es el sistema, cambiémoslo. Se puede hacer, ya se ha hecho en otros sitios y no lo tenían especialmente fácil. Pero hay que dejarse de integrismos, de purezas y sustituirlos por coraje y determinación, hay que atizar donde duele (metafóricamente hablando). Hay que fijar el objetivo y confluir en él, sin marcha atrás, hasta conseguirlo.

    La "constitución del miedo" de 1978 (muy democrática ella) está blindada contra la voluntad popular, los referéndums no pueden ser vinculantes y las ILPs tienen que ser aprobadas por los mismos que han provocado la reacción popular en su contra. Necesitamos un doble mecanismo de acción, una presión popular callejera intensa y constante y una representación parlamentaria claramente antisistema, "antiestesistema".

    Es necesaria la presencia institucional para desactivar el blindaje de la constitución y evitar una segunda transición o, como yo prefiero llamarla, una segunda estafa. Necesitamos un caballo de Troya que abra las puertas a un proceso constituyente con garantías de que no nos volverán a engañar, con garantías de que no le darán una nueva capa de maquillaje al franquismo.
    Y es necesaria la presión popular callejera para dotar de fuerza y legitimidad a la operación rupturista.
 
    Hay que empezar a confluir y hay que empezar ya. Pero sobre propuestas de alternativa, no sobre las expectativas de voto de quienes llevan 35 años pensándoselo.

    Ya sabéis, son cosas mías, pero estoy (como mis compañeras/os) a la entera disposición de quien quiera hablar seriamente de futuro, porque se puede vivir mejor y podemos conseguirlo.
 
 
 
 

      Málaga, 3 de Julio de 2013.


      Un militante de Alternativa Republicana (ALTER) de Málaga.



      Salud y República.



Desde el barbecho.

  Pasaron. Es un hecho.   Cualquier sociedad es la consecuencia de su propia historia y la española no es una excepción. La sociedad españ...